PROYECTOS 5. - ENTREGA 1

CENTRO DE ARTES ESCÉNICAS EN CUÉLLAR.
ANÁLISIS - CONTEXTO - ESTRATEGIA.

PERIMETER.

Enlace láminas entrega: Proy.5_Ej.1.1_pdf
































Se plantea un proyecto que consiste en la creación de un centro de artes escénicas en el municipio de Cuéllar (Segovia). Así como el pueblo goza de un gran atractivo turístico por su oferta patrimonial y de tradiciones festivas, existen zonas que están claramente promocionadas y otras que no gozan de tal suerte.
En nuestro caso se elige una parcela ambigua, ya que, por una parte, está anexa a un área que ha sido muy importante en la historia del pueblo y por otra reclama auxilio urbanístico.
En el terreno aledaño descansan las ruinas de lo que fue un gran centro religioso promocionado por la nobleza castellana. El Convento de San Francisco de Cuéllar supuso una gran actividad monástica, como se puede ver en los restos, que evidencian las reformas de ampliación que se fueron realizando para construir un primero y un segundo claustro.
Los acontecimientos históricos posteriores arrebataron la importancia que tuvo, pero le otorgó la oportunidad de un nuevo comienzo en desarrollo industrial de los años setenta al construirse en el interior del primer claustro una fábrica de achicoria. Ésto supuso, por segunda vez en la historia, que el enclave consistiese en un núcleo de centralidad del municipio.
Actualmente esos tiempos pasaron y el conjunto es presa del abandono. Por suerte, la administración ha tomado cartas en el asunto y actúa a favor de la revitalización de la zona.

El contexto de nuestro emplazamiento es ambiguo como ya hemos dicho. Actualmente la parcela consiste en una superficie sin asfaltar que se emplea como imprivisado aparcamiento de camiones y turismos sin control público ni privado.
Los edificios que lo envuelven muestran sus traseras poco atractivas a la plaza, que se enfrentan directamente a lo que fue la sacristía del antiguo convento (ahora recuperada) y a las ruinas murarias del claustro más grande.
En una ubicación azarosa, se muestran dos árboles de gran porte, que van a condicionar la actuación, ya que, por su imponencia, merecen ser tenidos en cuenta.
El entorno cercano que ejerce su influencia en el lugar tiene tintes de calma, tradición y una cierta soledad, si lo comparamos con las actividades pasadas.
De la observación se puede advertir cuáles son los viales principales que afectan a la parcela. Los lados Noroeste y Suroeste son los bordes que ofrecen los accesos interesantes a la parcela, así como el Noreste y el Sureste consisten en barreras arquitectónicas que comunican con un vial estrecho y poco interesante.
Tras la visita y el estudio del escenario, el proyecto se presenta como una oportunidad de volver a generar un lugar de centralidad. No se va a actuar directamente sobre lo existente, que correrá otra suerte a manos de los entes públicos, pero se va a actuar al lado y se creará una sinergia.

En resumen, el reto consiste en dotar de atractivo e importancia a una localización que no vive sus mejores momentos, pero que tiene el potencial necesario para volver a resurgir.
La actuación tiene que tener en cuenta el contexto global de la parcela. No se puede tratar el proyecto como un edificio que no presta suficiente atención a su alrededor. Es necesaria la regeneración integral del espacio urbano para crear un espacio interesante y atrayente. La vitalidad urbana se crea con la arquitectura que la rodea, es por lo que la estrategia que se propone consiste en convertir los defectos en virtudes.
La nueva edificación realizará un cosido de la arquitectura existente para convertir la plaza en un lugar con una atmósfera atractiva. Se proyectará adheriendo los volúmenes al perímetro de la parcela.
El concepto consiste en el antagonista de un claustro, pero con similar arquitectura. Se crea un anticlaustro que genere atracción en lugar de apartamiento. Una nueva plaza rodeada de actividades que congregue a habitantes, visitantes, actores, paseantes, etc...
Unos volúmenes que albergan llenos y vacíos, que articulan y separan espacios de relación y de circulación son unidos por un soportal contemporáneo y ligero que regulariza la plaza y hace suyos la pareja de árboles preexistentes para ahora formar parte del conjunto.
La experiencia usuario cuando accede a la nueva plaza no consiste en un lugar de dudosa calidad junto a un imponente edificio, ya que la arquitectura que se propone toma el control del emplazamiento.

Se proponen unos volúmenes de altura moderada, que no compiten contra la preexistencia patrimonial. El cuerpo que conforman los auditorios se enterrará ligeramente para conseguir trabajar en la misma cota que el resto de la edificación.
Se tiene en cuenta también la experiencia de los residentes. Pese a proyectar adheridos a la arquitectura existente, se diseñarán unos nuevos patios verdes que ofrezcan un escenario agradable a las ventanas que se arrojan a la plaza.
El acceso Suroeste a los auditorios, atravesando el muro del antiguo convento, se potenciará para generar la atracción del público y dar valor a la ruina.